¿Porqué debo congregarme con una iglesia?

Un artículo escrito por Bob Russell. Notas originales al texto han sido marcadas con obelisco (†). (Notas agregadas por la traductora han sido marcadas con asteriscos (*).

 
Cinco razones por la cual deberías asistir a la iglesia (Hebreos 10:22-25)

En algunos círculos cristianos está a la moda desasociarse de la iglesia local. La gente se jacta, «Soy un cristiano pero no soy parte de la iglesia institucional» o «Soy una persona espiritual pero no me meto a la religión organizada.» Algunos dejan la impresión de que han crecido más allá de la necesidad de participar regularmente en un culto de adoración en una congregación local.

Hebreos 10:24-25 nos manda, «y consideremos cómo estimularnos unos a otros al amor y a las buenas obras, no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos unos a otros, y mucho más al ver que el día se acerca.»

¿Por qué deben seguidores de Cristo participar en cultos de adoración semanales?

1) Te edifica. Puedes quejarte de que la música no es tu favorita o que el sermón te deja aburrido, pero la Palabra de Dios se lee, se sirve la Santa Cena, Cristo es exaltado y se pasa la ofrenda. Puede que te pares de la mesa cuando cenas, decepcionado de que la comida estuvo desabrida, pero de alguna manera tu sistema digestivo aún asimila la comida y tu cuerpo es nutrido. Lo mismo es verdad cuando regularmente asistes a un culto de adoración y te alimentas de la Palabra de Dios.

2) Te provee una oportunidad de servir a otros. Cuando asistes a la iglesia aprendes sobre las necesidades de hermanos cristianos y te motivas a ministrarles y orar por ellos. No se trata tan sólo de ti.

3) Testifica a los perdidos. Cuando tus vecinos te ven salir de tu casa cada domingo por la mañana, saben a dónde vas. Cuando el golfista pasa por el edificio de la iglesia el domingo por la mañana y ve los autos en el estacionamiento, es recordado sobre dónde debería estar. El asistir a la iglesia lenta y silenciosamente testifica al mundo sobre cuál lado estás. Cuando asistes regularmente a una iglesia tienes un lugar a dónde invitar a los perdidos a venir contigo para aprender sobre Cristo. Es asombroso cuánto más edificador se hace un culto de iglesia cuando alguien que no conoce al Señor está a tu lado.

4) Anima a otros. Un estudiante universitario joven estaba luchando con dudas. Estaba tan preocupado que decidió ir a una iglesia local el domingo en la mañana para ver si podía redescubrir la fe que había previamente servido como el fundamento de su vida. Esa mañana, en un culto tradicional de una vieja iglesia, su fe fue renovada y salió ese día una vez más comprometido a Cristo. El estudiante luego testificó que su inspiración no vino de los cantos ni de la predicación. Fue durante la oración pastoral que abrió sus ojos y miró a su alrededor. Ahí, a dos filas detrás de él, estaba un profesor de ciencias muy respetado, su cabeza inclinada en oración intensa. El joven se pensó a sí mismo, «Si ese profesor con toda su inteligencia puede creer, yo también puedo.»

Tal vez ese profesor universitario salió ese día decepcionado de que no sacó mucho del culto. Pero, sin saberlo, el hecho de que tomó el tiempo de juntarse con otros creyentes fue una fuente de ánimo para un estudiante joven. El simple hecho de asistir a la iglesia anima a otros hacia el amor y las buenas obras.

¿Y una razón final por la que debemos asistir a la iglesia regularmente?

5) Dios lo manda. Suficiente dicho.

 
Para ver más sobre el ministerio de Bob Russell, visiten su sitio AQUÍ, o busquen su página en Facebook.

La versión de la Biblia usada en este artículo es la NVI (Nueva Versión Internacional), a menos de ser específicamente notado.